En otro post de este blog hemos hablado de los estereotipos culturales que indefectiblemente trasmitimos de generación en generación sin ser apenas consciente de ello. En este sentido, estas actitudes sexistas aceptadas culturalmente en una sociedad como la nuestra, predominantemente patriarcal, se manifiestan en una inferioridad de condiciones cuando hablamos de las mujeres. Y son estos roles que pasan mayoritariamente desapercibidos, los que se definen bajo el término micromachismos.
Los micromachismos son demostraciones muy sutiles, poco perceptibles por estar reconocidas y que ejercen de una manera muy soterrada violencia a través de gestos o actitudes que se presentan en la vida cotidiana. El término fue acuñado por el psicólogo Luis Bonino, que hablaba de que se trata de “tiranías cotidianas, … una violencia blanda e invisible” que no son más que una forma de control de la sociedad patriarcal, creando un daño sutil pero profundo hacia la mujer que no se adecue al rol que le ha sido asignado en la sociedad.
Todas las personas somos capaces de cambiar nuestros actos y pensamientos en cuanto somos conscientes de que quizás no son los más adecuados
Es muy probable que muchas mujeres y hombres se sientan mal ante estas conductas por eso es importante estar alerta ante estos modos de actuar que no mejoran la convivencia y el respeto hacia otras personas. Esta serie de comportamientos socialmente aceptados se perpetúan en ambos sexos, por eso bien podría hablarse de microsexismos, prejuicios que tenemos tan interiorizados que nos resultan normales.
Descubre cómo te puede ayudar nuestra terapia psicológica
11 actitudes sexistas socialmente aceptadas
Todas las personas somos capaces de cambiar nuestros actos y pensamientos en cuanto somos conscientes de que quizás no son los más adecuados si anteponemos el respeto al prejuicio .
Aquí os proponemos una serie de actitudes que ponen en el punto de mira el estereotipo aceptado. ¿Te animas a participar?:
– Tienes un humor de perros, ¿estás con la regla?
– No sé si voy a saber arreglar un enchufe
-Por supuesto que ayudo en las cosas de casa
-Pediré permiso para llevar al niño al médico
– ¿Es que no piensas tener hijos? Lo digo porque te haces mayor…
– ¿Vas a ir con esa ropa?
– Hoy me toca hacer de niñera
– ¿Os apetecería ir a ver el partido?
– Tengo que cambiar el aceite del coche
– ¿Te va a acompañar alguien a casa cuando vuelvas?
– ¿Cómo conjugas tu vida familiar y laboral?
Sexismo invisible
¿Has imaginado a un hombre o a una mujer cuando has leído estas frases? Probablemente has caído en un estereotipo cultural aceptado. Es posible que algunas de estas frases solo se correspondan a uno de ellos, pero, vuelve a leerlas y cambia aquello que has pensado. ¿Es posible que la mayoría de las frases puedan decirlas tanto mujeres como hombres? ¿Qué piensas?
Probablemente al releerlas varias veces te has dado cuenta de que la mayoría de estas frases no son ni de hombres ni de mujeres, ambos podrían decirlas si le quitas el juicio de valor asignado. Esto no es más que el estereotipo que se ha manifestado sin haber pensado antes en ello por una cuestión cultural. Estos estereotipos son etiquetas que tienden a formalizar los tópicos y los prejuicios que en la mayor parte de los casos tienen un valor negativo. Este preconcepto lo interiorizamos en el proceso de construcción de nuestra identidad pero nada tienen que ver con la persona.